La historia de una mudanza...

  De mudanza me encuentro. Tercera en un año y espero que sea para largo.
  Creo que nunca sabemos cuantas cosas podemos llegar a tener hasta que no haces una mudanza. La de trastos inservibles que vamos acumulando a lo largo de toda nuestra vida que cuando llega el momento de trasladarte piensas porque guardaste esa cosa tan fea o para que querías usar ciertas cosas.
  Una vez metido todo el bolsas y cajas y llevados a su nuevo destino falta el ubicarlo todo y ahí es cuando por lo menos a mi me llega el problema... Notas que te falta espacio, que no van a caber las cosas, que faltan mas adornos de decoración, más utensilios, mas de todo.        Y empieza las aventuras de ir a los grandes almacenes en busca de ese armario nuevo de medidas imposibles de encontrar , que sea pequeño pero que quepa de todo, de la odisea de si pongo un sofá cama o cama nido en la segunda habitación, de ese sofá soñado por todos que cuando llegues a casa te llame para que te quedes acopladito ahí y no te deje levantarte, de ir a por cosas útiles y acabar con 4 velas aromáticas, una planta y un perchero y sin nada de lo que realmente ibas a buscar. Y es que es agobiante pero en mi caso es bonito y divertido acoplar una casa a tu gusto...convertirlo en tu hogar.